jueves, 31 de marzo de 2011

El Planeta Agua.

Es sorprendente como los gobernantes siempre se han burlado de sus gobernados. Nunca han cambiado, no importa cuantas revoluciones o conquistas existan.
Aquí en Chilpancingo no es la excepción ya que pasa lo mismo. Les mostraré como y porqué.
Desde que tengo memoria,  hablo de más de 50 años, la población ha tenido problemas para conseguir agua potable, sin ser tan exigente, simplemente agua, pedirla potable puede ser exagerado. Estamos en una zona tropical donde aún en años de pocas lluvias llueve suficiente para tener el agua que necesitamos, si no la tenemos es por la única razón de que somos una población desordenada y dependiente, de gobiernos incompetentes pero represivos, prepotentes y aprovechados.
Me quedo corto con esas palabras se puede escribir un libro inmenso de lo desordenado y dependiente que son los pobladores. Pero aún más grande sería el libro sobre lo irresponsables, prepotentes, incompetentes y perversamente aprovechados que son nuestros gobernantes.
Para muestra vasta lo que está sucediendo en este momento con el problema del agua:
La incompetencia del ayuntamiento de Chilpancingo para proveer del liquido a la población, obligación que no se les dio sino que ellos se la tomaron sin saber como podrían cumplirla, pero sí sabían que habría dinero del presupuesto y empleos que ellos podrían manejar como propios, además monopolizando el recurso. Ahora que ya la tienen no pueden atender el problema. La población exige, por comodidad, pero con los reclamos le causa escozor al gobernante y como perverso que es, intenta desesperadamente buscar culpables, obviamente fuera de su grupo, así es que inicia desplegando una campaña para culpar a los pobladores de desperdiciar el agua, exigiendo ahorrarla, ¡diablos!, si cuando yo era niño habíamos doce mil habitantes, ya entonces el agua era un problema, ahora somos muchos más donde está toda el agua ahorrada. Que banco se la pelo, hagamos un FOBAPROA del agua para rescatarlos y que siga habiendo… Pues, sigamos con el tema.
La comuna muy ferviente cumplidora de sus funciones, determina y aprueba que se debe castigar a los que desperdicien el agua ¿? ¿Acaso, se puede desperdiciar el agua? Probablemente sí, utilizándola para enfriar un reactor nuclear contaminándola de radioactividad. Pero aquí, ese no es el caso, quien y bajo que criterio definieron cuando se desperdicia y cuando no. Yo creo que la única que se utiliza bien es la que es para tomarse y la que se emplea para regar los cultivos, sin importar si se hace con manguera o con gotero. Toda la que se utiliza en otra cosa no es más que para ensuciarla y tirarla, sobretodo cuando se utiliza para bañar tanto perro que tienen los de Chilpancingo, incluyendo los de la comuna.
Entonces, ése es mi criterio, pero, no creo que sea el del riquillo político o  del empleado de alto nivel que tiene alberca en su casa o fuentes de adorno, o aquel que usa su yacusi todas las noches para sobarse su abultado vientre. Dígame, señora comuna, de incompetentes, ¿cual es su criterio para multar a quien la desperdicie y en que beneficiará el multar inocentes? serán los de la comuna que tendrán su bono al fin del trienio.

Los dichos son sabios:    “Agua que no has de beber déjala correr”.

Los ahorros, pensé que eran mafufadas de Z. o alucinaciones de sus borracheras mentales, por decir ya que ni bebe. ¿Dónde está la alcancía del ayuntamiento, donde se guardará toda el agua que ahorremos?
Nuestros regidores, encabezados por ya saben quien, cambiaron el dicho a:

“Agua que no has de beber ponla en la alcancía”…

 ¿No rima?, desde luego que no, porqué está mal.
Para que quede clara mi posición: el ahorrar agua no es la solución, con eso sólo estamos poniéndole una gran máscara al verdadero problema. Pero el gobernante sabe que con eso tendrá ocupada a la pelele población mientras ellos disfrutan con lo que verdaderamente daña el medio ambiente.

miércoles, 30 de marzo de 2011

Washington.

 

No conozco la ciudad de Washington. Para muchos, aunque los que me leen son pocos, les parecería una blasfemia. Sobre todo en esta época global. ¿Cuantos mexicanos no estarán viviendo ahí en este momento’, ¿cuantos no, también estuvieron ahí ya? Pues bien aún así confieso que no la conozco, viví tres años en EUA, y estuve a solamente 107 millas de la ciudad y aún así no fui ha visitarla; a pesar de que es la capital del imperio actual. Imaginarse que desde ahí se dictan las órdenes para exterminar poblaciones, claro está que por el bien de la democracia y las libertades ¿?.
Pues bien ya eche mi acostumbrado pica, pica.
Regresaré a lo que me trajo a este deseable momento, resulta que un amigo, con quien platicábamos de misterios, me invitó a leer un libro que según él me interesaría por lo bueno que es. Así que dejé de leer todo lo que pude he inicié  la lectura de tan propuesta obra, ya casi termino y aún así creó saber en que concluye por lo que siento que ya  puedo hablar algo de él, sin quemarles el final desde luego; dado que confieso que en este momento no lo he leído, así que no tengo manera de saberlo.
Este libro para mi gusto que es la guía de turismo, para visitar Washington, D. C, más impresionante que he leído; comparada en cuanto a descripción con las de otras ciudades, le encaja a uno el interés por conocerla de una manera fascinante, mostrándole a uno rincones de la misma que ni siquiera idea tenía uno de que pudieran existir.
Con respecto a la historia que cuenta, me parece pobre,  sus personajes sin personalidad, predecibles, siento que pensó que con decir que estaba hablando de los masones era suficiente tema para darles importancia, quizás para alguien que no haya escuchado de ellos, pero no me gustaron a mí. El escritor se sintió que vivía en la edad media hablando de religión, a de ser porque el imperio moderno está actuando como los de esa época.
Bueno si quieren leerlo, el libro es El Símbolo Perdido de Dan Brown. Realmente lo único perdido fue mi tiempo, no creo que en las 14 páginas que me faltan vaya a mejorar, ya lo terminaré para comentarles, por ahora seguiré con Epicuro.

domingo, 27 de marzo de 2011

La Fiel funciona.

Como les había  contando, después de esa experiencia extrema ya tengo la dichosa fiel, que por cierto con tanto movimiento, al momento de los cocolazos nunca supe cual fue, dado que lo que me dieron en el SAT no tiene nada de fiel sino que es un certificado.
¿Al menos que el susodicho sea de fiel? Pues me aventé como el borras, haciendo gala de mis conocimientos de informática, navegando a ciegas llegué a la parte del portal donde me dirían cómo obtener mis folios; para facturar  y código de barras bidimensional ¿? (Pues ya existen y los está usando el SAT. Así que no tardará el IFE en utilizar los tridimensionales; siempre quieren estar a la  vanguardia, al fin que los que pagan somos nosotros, gobernación no dudo que también, porque entre los tres se pelean por tenernos fichados para luego vender nuestros datos a los gangsters de tepito). 
Siguiendo las instrucciones intenté; o maldita sorpresa, no me hizo caso. Primero porque me pide la fiel ¿donde está?, no la encuentro ¿seré infiel?, ¿que hago pues? a crakearla, así lo hice y entré al portal, resultó que la fiel fue la clave que utilicé para generar el archivo key y reg, pues bien luego me pide esos dos archivos y posteriormente; ¿saben que? me manda un mensaje: de que no estoy certificado, bueno, luego, que mi certificado nuevito ya estaba caducado ¿?  Ja, ja ni moder,  a mi no me delatas, yo soy fiel y más te vale que te dejes.
Pues inmediatamente que me voy al archivo del certificado, que precisamente haciéndole doble clic se abre como un diploma de escuela pipiris nice y por ahí indica que se ejecute; o sea se arranque o como les guste decirle ustedes a la acción de ejecutar un programa. Lo hice y regresé al portal del SAT para repetir la acción ahora fíjense que sí me genera mis folios y me enseña una página de aprobación para imprimir y un link para obtener el dichoso código de barras, intento imprimir la aprobación y ¡error!, intento con el link ¡error!, bonito portal oficial de una de las secretarías que más dinero tiene, no saben hacer portales, cómo que dando errores, algo hice tan mal que ni ellos sabían que uno lo podía hacer, pues saben que fue lo que hice mal, pues fue el hecho de que no soy hijo de Microsoft; como lo son ellos y mi navegador es Mozilla Firefox y no Explorer, bien ese fue mi pecado, ¡apa gobiernito! no cabe duda que se entrega al mejor postor.   Luego les seguiré comentando.

jueves, 17 de marzo de 2011

Fidelidad.

No pude dejar de ser fiel, así que me tuve que hacer de valor, junté toda la documentación tanto virtual como la no virtual (acta de nacimiento reciente y copia más reciente; nací hace sesenta años espero que sea suficientemente reciente, formato FE; no me faltó fe la llevé conmigo, archivo key. y reg., credencial de elector y copia; donde quiera y en todo tiempo se vota aquí en México siempre es temporada de elecciones por eso se tiene que ir preparado con la credencial, la marmaja para los pasajes y para el desayuno y por si las moscas la mordida y algo para el micro secuestro, los bloqueos y los ladrones de caminos, nunca se sabe en este México libre y global) y fui a Iguala a que me certificaran como fiel.
Así es que el miércoles 16 de marzo del 2011 me levanté tempranito y con la compañía del contador nos dirigimos al lugar mencionado, nos fuimos en autobús, en uno de paso  que se dirigía a Ciudad Altamirano ¡huy que miedo! El mero nido de los narcos, dicen. No era corrida directa por lo que fue deteniéndose en cada poblado pero aún así llegamos a tiempo a la oficina del SAT donde previamente habíamos hecho cita, una que claramente, el instructivo decía, no era necesaria, pero que fue buena idea del contador hacerla porque de no haberlo hecho no nos atiende. Llegamos y nos identificamos, nos pasaron a la sala de espera pero sorpresivamente y a diferencia de otras veces y en otros lugares del gobierno nos atendieron rápido y bien sin contratiempos; muchas gracias y felicidades. Lo único que noté irregular, espero que no sea razón para después terminar ejecutado, fue el caso de que frente a mí en la sala donde nos atendieron estaba el instructivo de cómo se efectuaría el fichaje, quiero pausar aquí para hacer un breve comentario:
Resulta que en México antes la gente honesta fichaban a los delincuentes para que se supiera quienes eran y fuera más fácil echarles guante si volvían a delinquir ahora los delincuentes fichan a la gente honesta para esquilmarlas sin que se puedan esconder.
Bueno ese era el comentario ahora continuaré con la incongruencia que noté, en el instructivo decía: primero las huellas de la mano izquierda, después la de la derecha y posteriormente los pulgares, luego el iris y al final la foto, que les parece quieren más fichaje.
Pues bien no siguió el orden el operador ya que empezó por la mano derecha luego la izquierda y después los pulgares y repitió luego la izquierda después la derecha y al final los pulgares siguió el iris los iris y al último la foto y pásele a firmar, querían más ¿no?
Me dio buenos consejos, como el de guardar después de hacer copias del archivo certificador ¿? , que en cuatro años debo revalidar ya sin ir a ese lugar sino que bien puede efectuarse por Internet.
Después dado el estrés y los nervios aumentó el hambre, por lo que tuve ahora si que auxiliarme del contador para que me indicara algún lugar donde se pudiera almorzar sabroso, no cabe duda que tengo a un contador muy capaz, inmediatamente me dio rumbo y sin fallarle almorzamos rico y barato. Después caminamos a la Terminal, que para suerte estaba a unas cuadras, partimos de regreso a Chilpancingo sin problemas; llegamos vivos, aquí terminó esta aventura extrema para seguir siendo fieles. Aquel que dude, de si fue extrema, quiero decirles que los lugares en donde anduvimos están considerados como los más peligrosos del mundo.    
   

domingo, 13 de marzo de 2011

De dos en dos

En el siglo pasado la preocupación principal de los gobiernos de la revolución, en cuanto a la parte social, era la de que todos los mexicanos tuvieran suficientes alimentos y educación. La mayoría eran analfabetas y hambrientos. Los programas oficiales lograron que la clase media creciera, se construyeron escuelas casi en todos los  municipios, llegó a tener una universidad cada estado. Esto no fue hecho desde luego de una manera científica, sino que más bien con una visión entusiasta, por lo que gran cantidad de dinero se destinó sin un orden adecuado con orientación a resolver el problema evitando desvíos y consecuencias perjudiciales a la larga, sin prevenir también las consecuencias sociales derivadas de una población educada y alimentada. La imagen del país en el mundo era la de uno que caminaba hacia el progreso en un ambiente de paz.
Grupos internos empezaron a presionar para una apertura democrática lo que demostraba que los dos principales problemas dejaban de serlo. Para la sociedad tener democracia resultaba ahora más atractivo que comer y educarse. Esto podría deberse al que ya dichos rublos estaban cumplidos y que pocos eran quienes necesitaban esa atención.
Llegó el nuevo siglo y con él la deseada democracia, un país educado y alimentado y aparentemente demócrata, ahora los dos principales problemas que aquejan al país resultaron, precisamente, de la solución de los dos problemas del siglo pasado, los inconvenientes a los que me refiero, ahora, son la obesidad y el desempleo. Al haber mejor manera de obtener alimentos, la gente come de más; volviéndose obeso. Por ser educado ya abandonó las labores del campo,  ahora exige empleo. Existe mucho desempleo. México se convierte a pasos gigantes en el paraíso para los empresarios ya que a mayor oferta menor el salario un atractivo significante para la inversión. Pero no por ahora, ya que el inversionista lo quiere todo y donde lo tiene es donde está.
La obesidad ocasiona enfermedades que han creado todo un mercado a su alrededor, que ofrece soluciones (hospitalización especializada, medicinas costosísimas, operaciones sofisticadas, seguros médicos) a cambio de dinero. Sin embargo la carencia del mismo a ocasionado que muchos se dediquen a las actividades lucrativas no licitas (Secuestros, narcomenudeo y mayoreo, fraudes, créditos vencidos, corrupción) con la esperanza de poder aspirar a esas curas milagrosas ya sea porque las sufren ellos o sus familiares o por miedo a sufrirlas, lo que a convertido a México en un lugar poco seguro y también no tan atractivo para los inversionistas ni mucho menos para los turistas, lo que agrava la escasez de dinero. Los más educados se van de México en busca de la piedra filosofal, dejando a México sumido en la desesperación para resolver un problema de fondo, con un encargado, del asunto, desfondado. Las grandes empresas mexicanas compran todo en el extranjero y no tienen ninguna intención de aumentar su planta de empleo, algunas incluso prefieren poner plantas en otros países, o invertir sus ganancias en las bolsas de otros países; donde les sale más barato y más seguro. México tiene más exportaciones que nunca y más desempleados que nunca también.
Por todo el país se abren tiendas con la cantaleta de que generan empleos pero esos empleos no son verdaderos ya que nadie puede mantener una familia con esos salarios, la prueba contundente es la gran frecuencia de rotación de su personal. Además estas mismas tiendas obligan a cerrar a otras que mantenían familias a niveles salariales envidiables, a causa de que los gobiernos locales se gastan sus recursos en las de cadena en lugar de las tiendas de las familias lugareñas.

Realmente no existe un gran problema, verdaderamente lo que existe son gobernantes incompetentes o traidores ante una situación ya sea originada deliberadamente o no resuelta por incapacidad o porque resolverla sería dejar las ganancias que los que gobiernan obtienen de esta manera de gobernar.
Pues bien como los dos primeros problemas se llevaron un siglo ya no alcanzaré a ver la solución de estos dos actuales. Ya verán la solución aquellos que todavía vivan en el siglo xxii. Pero les advierto que tendrán otros dos para resolver, que ya empiezan a visualizarse y que podría ser la contaminación y la carencia de recursos naturales.    

viernes, 11 de marzo de 2011

De a poquito es mejor.

El otro día mi amigo, J. D.,  llegó para invitarme a una serie de conferencias, en radio UAG., relacionadas con la  alimentación.
Él lo que quiere  o pretende hacer es enseñar a los jóvenes a comer correctamente; pero no a usar cubiertos ni buenas maneras en la mesa, más bien para que sepan escoger sus alimentos de tal forma que no sufran las consecuencias por hacerlo mal.
Me desconcertó el que me haya invitado, ya que mi área de conocimiento es otra, yo estudié comunicaciones y electrónica y actualmente soy comerciante en el giro de la medicina veterinaria; pensé que quizás lo hizo creyendo que si pude migrar con éxito de comunicaciones y electrónica a veterinaria, bien podría hacerlo, ahora, a la alimentación.
Bueno, no fue por eso que me invitó, sino que él se dio cuenta que a mis sesenta años me conservo como en alcohol, bueno no precisamente pero casi; o sea estoy mejor que la mayoría a esta edad, el también se conserva bien. Por lo que consideró que seríamos ejemplares para hablar de algo que preocupa a todos o casi.
Pues bien, al principio como que le quise sacar al parche, pero no es mi costumbre rajarme  a los retos intelectuales; por lo que me dije, vamos a ver que resulta. Lo que resultó es que esto de la alimentación es algo verdaderamente fascinante, profundo, casi místico. Tiene poco de ciencia (de esto después hablaremos más) a pesar de que muchos científicos se dedican al asunto, sobre todo aquellos que están en la industria de la alimentación de animales.
Pues bien, Jaime al principio me insinuó que yo me alimentaba bien, yo consideré, entonces, que eso era indiscutible; por lo que lo acepté. No soportó mucho esa mentira, ya que con el andar de las investigaciones que hacíamos para las conferencias fui dándome cuenta que mi alimentación es a base de puros venenos, sin embargo lo impresionante es que me encuentro sano al menos más sano que la mayoría de los de mi edad, además vivo. Me hicieron el perfil de lípido y no tengo incongruencias; estoy mejor que lo que muchos quisieran estar a cualquier edad, no tengo glucosa, ni hipertensión, con el agregado de que todos los sábados juego un partido de fútbol de 90 minutos entre equipos donde se mezclan jóvenes de menos de 25 años. Juego al ritmo de ellos, incluso a veces resulto más rápido que algunos de los jóvenes y con mejor condición física.
Como pueden notar algo anda mal en cuanto a la apreciación maligna de esos alimentos que tanta alarma causan. ¿Son realmente tóxicos o no? Yo digo que como en cualquier sustancia, (en  esto soy algo experto, ya que llevo más de veinte años vendiendo sustancias tóxica),  “la dosis es lo que mata” o sea la cantidad que uno ingiere. Les explicaré ejemplificando: el arsénico, creo que todos han oído hablar de él, es  un poderosísimo veneno, sin embargo en dosis bajas es un estimulante, bueno para el apetito, además que también es fortificante y anabólico. Como resulta barato los laboratorios lo han desechado para poner en su lugar cosas que funcionan iguales pero mucho más caras.
Siguiendo en lo de mi alimentación el éxito no está en lo que como si no que en la cantidad. Así  que hasta ahora mi conclusión es: que en cuanto a comida, preferible llevársela de a poquito. Al parecer eso es lo exitoso en cuanto a nutrirse sanamente.

viernes, 4 de marzo de 2011

Z y el registro civil


Se le acabó el sexenio, ahora quiere a través de la propaganda hacer creer a la población que gobernó pasable, además que dejó todo listo para qué el que sigue no la riegue como él, está bien que le crean los que quieran, realmente no fue él mejor que otro, ni el que viene lo mejorará, seguirán siendo todos iguales: perversos y aprovechados.
Hablo  de, bueno creo que ya saben de quienes, pero estos que tienen el empleo de gobers, si que son preciosos para defenderse.
Miren ustedes del que hablo dice que modernizó con tecnología de punta el registro civil, a sí él lo dice; yo diría que comprarle una PC  o lap a un idiota no lo mejora nada más lo convierte en un idiota con pc o con lap.
El registro civil está tan ineficaz como lo era antes o quizás más aún. Ya en otra ocasión había mencionado algo, ahora diré más. Resulta que para corregir lo que la ineptitud de los que registran en el registro civil uno debe pagar, ¡claro!, si no de donde se pagará el equipo de punta y el diez que se llevan, bueno, acepto, pero al menos ya que se paga deberían otorgar el servicio que se paga; pero no, parece ser que uno se forma en una cola donde regalarán despensas y atienden los mismos burócratas ineptos y retrasados de siempre esos sí rodeados de equipo sofisticado y con pulcros uniformes. Además para recoger los papeles de la corrección; más bien dicho: los que demuestran que se efectuó la corrección, que para mi gusto no importan; dado que si la hicieron; hecha está, y si no, aunque tenga uno los papeles tendremos que pagar de nuevo para que se corrija. Pero eso no es todo: usted llega con sus recibos de pagos,  en tiempo y forma,  resulta que sus recibos no son suficiente prueba para recoger los documentos que avalan, un debe presentar credencial de elector, esto de la democracia ya se exageró ahora se necesita votar en todas partes, pues bien se enseña la credencial, pero como podría ser uno tan inocente para creer que presentarla sería suficiente, no , lo mandan; sí,¡lo mandan! a que le saque copia fotostática óigalo bien copia fotostática en esta época de la tecnología de las facturas virtuales, para que con esa copia avalen de que realmente alguien que vota, recogió el documento que certifica los cambios que a fin de cuentas de nada sirve el desgraciado papelito, como no sirvió el haberse registrado al nacer. Porque ya inventarán otra estrategia para sacarte más dinero y mantenerte en estado de sometimiento.
Aquí sigo, al parecer solito.